Hoy todo mundo habla de Afganistán y el regreso al poder de los talibanes con todo lo que eso significa: el fanatismo religioso y la violación de los derechos humanos, en especial a mujeres y niñas.
Y es que, independientemente del régimen talibán, las diferencias culturales de entre los países de occidente y Afganistán son muchas; la mejor muestra de ello es su deporte nacional, el Buzkashi.
El Buzkashi es un antiguo deporte, y para muchos uno muy cruel, en el que dos equipos de 10 hombres cada uno, a caballo, tratan de llevar a una cabra con la cabeza y dos de sus extremidades amputadas al circulo que representa la 'zona de justicia'.
El circulo puede estar al centro del campo o en sus extremos, dependiendo las variantes.
El juego carece de mayores reglas, por lo que suele tornarse muy violento y necesita que los caballos y los chapandaz (jinetes), tengan una gran preparación para aguantar el ritmo del encuentro.
En los partidos de Buzkashi se mueve mucho dinero, tanto en apuestas como en la preparación del mismo, ya que es gente millonaria la que los costea y que pone a los mejores caballos a su disposición.
Se cree que el juego nació en el Siglo V en las tribus nómadas de la región que lo fueron llevando al resto de oriente. Una versión similar, de nombre 'Kokpar', se practica en Uzbekistán y Kirguistán.
de a poco se han ido instaurando algunas reglas, como que no se le pegue de manera intencional a los jinetes, que exista un árbitro y que se usen lo menos posible los látigos de los chapandaz.
Irónicamente, los talibanes prohibieron este deporte mientras estuvieron al mando de Afganistán, por lo que se cree vuelvan a hacerlo en su retorno al poder 20 años después.